
Ahora, dos hombres estadounidenses han querido hacer lo mismo y, para celebrar el Día de la Madre, trataron de experimentar el dolor que puede llegar a sufrir una mujer que decide tener a su bebé sin anestesia. El sufrimiento fue tal, que uno de ellos llegó a pedirle disculpas a su madre, por nacer:“Mamá, lo siento”.
De igual modo que lo hicieron en Holanda, estos dos hombres se dejaron poner un cinturón con electrodos que cada cierto tiempo les iban provocando contracciones abdominales de una fuerza similar a las que se producen en el útero de una mujer. Acudieron a un centro médico en Troy, Michigan, y allí les pusieron el invento que en pocos minutos les hizo sufrir el dolor de un parto.
Al acabar, uno de los hombres le mandó un mensaje a su madre:
Mamá, si algo de lo que acabo de experimentar se acerca siquiera un poco a lo que te hice hace tantos años, lo siento, eres como una superheroína.

El anterior vídeo me pareció divertido y novedoso, el de estos dos hombres curioso, pero repetitivo. Espero que ahora no les dé a todos los hombres por ir a centros médicos para grabarse con electroestimulación abdominal.
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